Muerdo el anzuelo y vuelvo a empezar de nuevo....
Siento que pasan los días y sigo adelante tracción a sangre. Tras una melodía. Creo que te hice tan míoque por un instante te olvidé.
lunes, 30 de abril de 2012
domingo, 29 de abril de 2012
Tu amor.
Yo quise el fin y había más,
yo quise mas no había fin.
lo que yo quise encontrar estaba atrás y no aquí.
desde las sombras no vi, las sombras y no vi luz,
no voy a llorar si nadie me acompaña,
no voy dejar ni un camino sin andar.
Aunque sea el fin del amor,
yo he visto el fin del disfraz,
yo quiero el fin del dolor,
pero no hay fin siempre hay más.
no existe sombra, no existe culpa,
no existe cruz.
No voy a esperar las ganas que yo extraño,
no voy a esperar que el destino hable por mi,
en medio de las lluvias del invierno,
no hay tiempo ni lugar,
yo sé que entenderás que amor,
para quién busca una respuesta,
es un poquito mas, que hacerte bien.
Yo tuve el fin y era más,
yo tuve más y era el fin,
yo tuve el mundo a mis pies,
y no era nada sin ti.
Cruzé la línea final por,
tu amor.
tan fuerte como lo amo,
tu amor.
para borrar al mundo mejor.
Tu amor me enseña a vivir,
tu amor me enseña a sentir,
tu amor.
Yo tuve el fin y era más,
yo tuve más y era el fin,
yo tuve el mundo a mis pies,
y no era nada sin ti,
seremos algo con nuestro amor.
martes, 10 de abril de 2012
Invaden mi coraz♥n.
Yo a vos no te creo nada, como vos vas a creer en mi. Universos de tierra y agua, me alejan de vos. Las tumbas son para los muertos, las flores para sentirse bien. La vida es gozarla, la vida es para vivirla mejor.
Dicen que no hay que arrepentirse de las cosas que hacemos o decimos.
¿Pero cual hay si me arrepiento?
Ah cierto, todo pasa por algo.
lunes, 9 de abril de 2012
Out in space, part II
Y de repente, un día me vi parada sobre la ciudad. Hecha una mujer. Dejé atrás los juguetes, las muñecas y comencé a vivir. A valerme por mi misma, a sentirme plena, a hacer cambios, a dar y recibir amor, a sentir que con la música, con sus letras y melodías, podía llegar a sentirme más que identificada. Sentirme parte de ella. Caminando por una calle vi mi vida, a veces tropezaba con la misma piedra, otras veces me caía, pero volvía a levantarme porque el camino sigue. Comencé a extrañar, a necesitar. A quererme. A quererte.
A comprender que si no hacemos lo que queremos, no vamos a llegar a nada. Que todo pasa por algo, que si cierta ocasión sucedió fue porque así tuvo que ser, porque estaba en el lugar, en el momento y en la hora indicada. Parada, esperando a que suceda, sin saberlo.
Miré para atrás y vi todo lo que dejé, todo lo que evolucionó de mi. Pero saber que dentro mío, todavía existe esa niña que llora con una película de dibujos animados, esa niña que cuando llega a su casa espera recibir la comida que le gusta. Que se divierte con cosas que quizás para el ojo ajeno son insignificancias. Pero eso es lo que me encanta. Lo poco. Lo mínimo. Los pequeños detalles marcan la gran diferencia. Y así me vi un día. Corriendo por quien lo merecía, por quién me necesitaba. Frenada por quienes lo ameritaban, por quienes me querían. Con moretones por golpes que me di en todo este trayecto. Con cicatrices que con el tiempo se borran pero no del todo. Para verlas, para que no las olvides. Para que nunca dejes de recordar lo que fuiste, lo que pasaste.
Y así me veo hoy. Hecha una mujer, con alma de niña, con la sensibilidad a flor de piel. Con la mirada puesta en un futuro, lleno de proyectos. Algunos planeados para lograrlos sola, otros para vivirlos con alguien que esté a mi lado. Ya sean amistades o amores o familia.
Y así me veo hoy.
Out in space. Part I
Hace mucho que no logro inspirarme en nada. Hago intentos para escribir algo, pero siempre termino dejándolo por la mitad. A pesar de que lo hago sin fines de nada, sólo para sentirme mejor, quizás. Escribo como método de descarga. Como un arma de defensa, para expresar las cosas que siento. Y últimamente ni yo sé como me siento. Me están sucediendo cosas buenas, otras raras. Raras, porque son nuevas y las cosas que son nuevas siempre, además de sorprendernos, nos causan una mezcla de miedo y curiosidad a la vez.
Encontré algo que me gusta hacer y es bailar. Está bueno conectarse profundamente con la música. Me siento parte de ella y aunque suene medio raro, la siento fluir en mi cuerpo.
Por otro lado, estoy conociendo una parte nueva de mi misma, pero a su vez quisiera dejar el orgullo de lado y actuar como quiero. No entiendo qué fue lo que me hizo ser así. Yo opino que uno es como lo trataron. En base a esos tratos, te formás como persona. Estoy contenta con mi personalidad, a pesar de los defectos que trato día a día de cambiar, por algo soy así. Puedo ser una persona terca, a veces un poco caprichosa, solitaria aunque no lo parezca. Me volví muy fría y quizás hasta un poco egoísta. Pero sin embargo, sigo manteniendo mis virtudes. Algo que me gusta de mi es que las personas recurran a mi para contarme sus cosas y que me pidan algún consejo. Sé que no soy la mejor dándolos, pero es lindo que confíen en una misma. De hecho, la confianza es algo que se gana y cuesta mucho formarla. No obstante, se pierde en un abrir y cerrar de ojos cuando te clavan el puñal por detrás.
A mi me cuesta mucho volver a confiar en alguien. De hecho, en estos últimos años me volví lo más desconfiado que hay. No creo más en nada. Si vamos al caso de los 'amores', no creo en chamuyos, me gusta que me demuestren con hechos lo que quieran. Las palabras quedan en un pasado. Y una imágen vale más que mil palabras. Pero volviendo al tema del orgullo, muchas veces perdí cosas, momentos por él. Y no comprendo porqué no puedo evitar ser así. ¿Quizás por amor propio? Pero es como autoflajelarse, termino haciendo todo lo contrario a lo que siento por no querer arriesgarme en el fondo. Para no sufrir y para prevenir. Pero comprendo también que a veces hay que lastimarnos para aprender, pero por otro lado creo que sufrí demasiado y aprendí mucho. Pero no sé si me quedé con la mejor enseñanza de todo esto.
Aprendí también que no hay que mostrarse siempre en un 100%. Ni siquiera en un 50%, cuanto más reservado podés llegar a ser, creo que mejor te va a ir. Y demostrar los sentimientos es tirarse en una pileta llena de tiburones hambrientos. Vas a terminar herido.
La vida es como un bosque, y las personas somos como árboles. Siempre recuerdo una frase que me dijo mi tío hace un par de años No dejes que el árbol te tape el bosque, porque es ahí donde vas a encontrar la respuesta. Y tuvo mucha razón. Un grande Carlitos.
Concluyendo, me fui por las ramas y creo haber encontrado el punto donde quería desembocar y es mi orgullo. No es el caso que me moleste serlo, sino lo que me perturba un poco es no poder controlarlo. No está tan bueno. Por otro lado, pienso que las oportunidades a veces se dan una sóla vez en la vida y habría que aprovecharlo. Otros pueden decir, que las oportunidades son como un único boomerang. Se van, pero tarde o temprano vuelven a tus manos. El tema es que el boomerang no te pegue en la cara dejándote un golpazo y una marca de por vida. Hablando metafóricamente, claro. A menos que alguna vez les haya pasado, espero que se hayan puesto hielo.
¿Pero qué puedo hacer si a veces no sé si la oportunidad se presentó en el momento indicado? Me da miedo de quedarme en la nada misma y perder todo lo jugado. Cuando apostás y te quedás sin nada, nuevamente tenés que volver a empezar. Aceptar la derrota y seguir jugando. En una de esas quién te dice, te llevás el premio mayor.
Encontré algo que me gusta hacer y es bailar. Está bueno conectarse profundamente con la música. Me siento parte de ella y aunque suene medio raro, la siento fluir en mi cuerpo.
Por otro lado, estoy conociendo una parte nueva de mi misma, pero a su vez quisiera dejar el orgullo de lado y actuar como quiero. No entiendo qué fue lo que me hizo ser así. Yo opino que uno es como lo trataron. En base a esos tratos, te formás como persona. Estoy contenta con mi personalidad, a pesar de los defectos que trato día a día de cambiar, por algo soy así. Puedo ser una persona terca, a veces un poco caprichosa, solitaria aunque no lo parezca. Me volví muy fría y quizás hasta un poco egoísta. Pero sin embargo, sigo manteniendo mis virtudes. Algo que me gusta de mi es que las personas recurran a mi para contarme sus cosas y que me pidan algún consejo. Sé que no soy la mejor dándolos, pero es lindo que confíen en una misma. De hecho, la confianza es algo que se gana y cuesta mucho formarla. No obstante, se pierde en un abrir y cerrar de ojos cuando te clavan el puñal por detrás.
A mi me cuesta mucho volver a confiar en alguien. De hecho, en estos últimos años me volví lo más desconfiado que hay. No creo más en nada. Si vamos al caso de los 'amores', no creo en chamuyos, me gusta que me demuestren con hechos lo que quieran. Las palabras quedan en un pasado. Y una imágen vale más que mil palabras. Pero volviendo al tema del orgullo, muchas veces perdí cosas, momentos por él. Y no comprendo porqué no puedo evitar ser así. ¿Quizás por amor propio? Pero es como autoflajelarse, termino haciendo todo lo contrario a lo que siento por no querer arriesgarme en el fondo. Para no sufrir y para prevenir. Pero comprendo también que a veces hay que lastimarnos para aprender, pero por otro lado creo que sufrí demasiado y aprendí mucho. Pero no sé si me quedé con la mejor enseñanza de todo esto.
Aprendí también que no hay que mostrarse siempre en un 100%. Ni siquiera en un 50%, cuanto más reservado podés llegar a ser, creo que mejor te va a ir. Y demostrar los sentimientos es tirarse en una pileta llena de tiburones hambrientos. Vas a terminar herido.
La vida es como un bosque, y las personas somos como árboles. Siempre recuerdo una frase que me dijo mi tío hace un par de años No dejes que el árbol te tape el bosque, porque es ahí donde vas a encontrar la respuesta. Y tuvo mucha razón. Un grande Carlitos.
Concluyendo, me fui por las ramas y creo haber encontrado el punto donde quería desembocar y es mi orgullo. No es el caso que me moleste serlo, sino lo que me perturba un poco es no poder controlarlo. No está tan bueno. Por otro lado, pienso que las oportunidades a veces se dan una sóla vez en la vida y habría que aprovecharlo. Otros pueden decir, que las oportunidades son como un único boomerang. Se van, pero tarde o temprano vuelven a tus manos. El tema es que el boomerang no te pegue en la cara dejándote un golpazo y una marca de por vida. Hablando metafóricamente, claro. A menos que alguna vez les haya pasado, espero que se hayan puesto hielo.
¿Pero qué puedo hacer si a veces no sé si la oportunidad se presentó en el momento indicado? Me da miedo de quedarme en la nada misma y perder todo lo jugado. Cuando apostás y te quedás sin nada, nuevamente tenés que volver a empezar. Aceptar la derrota y seguir jugando. En una de esas quién te dice, te llevás el premio mayor.
martes, 3 de abril de 2012
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Porque es más dificil de lo que pensaba olvidarse de alguien. Es que te veo y causas que parte de mi mundo se desmorone y la otra que tome color. Porque pasa el tiempo y ni yo creo estar como estoy por vos. No sé si forma parte de esperar algo que nunca va suceder, ya sea por haberte idealizado o porque así tuvo que ser.
Pero no puedo evitar que cuando te veo mi corazón lata a mil por hora y el pulso me tiemble. Haciendo un tsunami en mi mente, oyendo voces que me piden que te olvide, que no sos para mi. ¿Pero como engañar al corazón?
Si él mismo nos engaña a nosotros.
O yo misma me dejo engañar por él.
Pero no puedo evitar que cuando te veo mi corazón lata a mil por hora y el pulso me tiemble. Haciendo un tsunami en mi mente, oyendo voces que me piden que te olvide, que no sos para mi. ¿Pero como engañar al corazón?
Si él mismo nos engaña a nosotros.
O yo misma me dejo engañar por él.
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